Nook Color es la gran apuesta de Barnes & Noble para competir en la campaña de navidad, a priori, con el resto de lectores de libros electrónicos. Y digo a priori porque, como su propio nombre indica, hablamos de un dispositivo diferenciado en el sector por su pantalla en color y por estar basado en Android, lo que debería abrirle las puertas a más tipos de contenidos (libros con fotografías, revistas) y experiencias más allá de la lectura. Mi impresión es que es una batalla que no pueden ganar en B&N con Nook, al final tienen un dispositivo incapaz de competir con el resto de tablets del mercado (capan Android, que además a día de hoy tampoco está orientado a un tablet) y penalizan la experiencia de lectura con más peso, más consumo y una pantalla LCD.
Al final volvemos al debate del lector de libros electrónicos frente al usuario multitarea y multimedia. Como entonces sigo pensando que las limitaciones de la actual generación de lectores digitales son, también, una virtud: leer sin distracciones, interrupciones, multitarea o multimedia, el cacharro que uno coge para disfrutar de un texto largo y que requiere cierto tiempo de concentración y aislamiento. Serán probablemente, ante la eclosión de tablets, un producto de nicho, pero de un nicho interesante: el perfil de lector que compra más de 15 libros al año. Apostaría a que Amazon acabe entrando en el mercado de tablets con Android, pero este movimiento del Nook Color se queda a medio camino de ambos tipos de dispositivos. Más caro y con peor experiencia de lectura que un lector de libros electrónico normal, más limitado que un tablet.
Más información y vídeos en Engadget y CrunchGear.
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